Lavanda: características, ventajas y contraindicaciones
Las características principales de la lavanda incluyen propiedades relajantes, hipotensoras, digestivas y cicatrizantes. Entre los beneficios que aporta se encuentra la reducción del estrés, alivio de migrañas, mejora de la digestión pesada y limpieza de la piel. Es importante considerar las precauciones de la lavanda, como no aplicar el aceite esencial directamente en la piel, evitar su uso en personas con presión arterial baja o con problemas de estreñimiento, ya que podría agravar la situación.
La lavanda es una planta muy utilizada en aromaterapia gracias a su distintivo aceite esencial. Se desarrolla como un arbusto de unos 50 centímetros de altura, con hojas lineales de tono verde azulado y tricomas que le proporcionan una apariencia velluda. Su característica más reconocible son sus flores moradas en forma de espiga que aparecen desde la primavera hasta finales de verano. Aunque se utiliza principalmente como planta ornamental, posee numerosas propiedades beneficiosas para la salud, lo que la convierte en una planta medicinal muy popular. Si deseas conocer en detalle las características de la lavanda, sus ventajas y contraindicaciones, así como otros aspectos, continúa leyendo esta guía de ContaminaciónAmbiental.
Características de la lavanda
Las características de la lavanda se derivan de sus componentes activos, entre los cuales se encuentran flavonoides, taninos, cumarinas y fitoesteroles, siendo los más relevantes los aceites esenciales como el linalool, borneol y cineol. Estos elementos le confieren propiedades como:
- Sedantes
- Antidepresivas
- Relajantes
- Hipotensoras
- Digestivas
- Diuréticas
- Coleréticas
- Cicatrizantes
- Antiespasmódicas
- Carminativas
- Antisépticas

Ventajas de la lavanda
Reduce el estrés, la ansiedad y mejora el sueño
Esta hierba es conocida por sus propiedades relajantes y puede ser utilizada para aliviar tensiones emocionales y nerviosas, como irritabilidad, estrés e insomnio. Es útil en el tratamiento de casos leves de ansiedad o depresión, especialmente en etapas iniciales. Asimismo, es beneficiosa para calmar trastornos gastrointestinales relacionados con estrés y nerviosismo.
En casos de dificultades para conciliar el sueño debido a nerviosismo, puedes conocer aquí Las mejores infusiones para mejorar el descanso.
Alivia dolores de cabeza
Si buscas reducir la dependencia de analgésicos para dolores de cabeza y migrañas, tener lavanda a mano puede ser de gran ayuda para aliviar este tipo de molestias.
Facilita la digestión
La lavanda actúa directamente en el proceso digestivo, contribuyendo a reducir la flatulencia, los cólicos y aliviar los espasmos dolorosos asociados a digestiones pesadas. Puede ser incorporada en casos de problemas digestivos crónicos o después de comidas copiosas para aliviar la digestión.
Purifica la piel
Además de sus beneficios para la salud, la lavanda posee propiedades cosméticas, como su efecto antiséptico que resulta útil para tratar acné, infecciones bucales y cándidas. También ayuda a limpiar heridas abiertas y proporcionar una protección antiséptica contra bacterias dañinas, acelerando la cicatrización para prevenir marcas, incluso en casos de úlceras y quemaduras.
Además, constituye un excelente remedio natural para aliviar la comezón producida por las picaduras de mosquito. Aquí te explicamos cómo puedes ahuyentar a los mosquitos utilizando lavanda y muchos otros trucos.
Formas de utilizar la lavanda
Infusión de lavanda
Se elabora con las flores o cabezuelas de la planta. Se recomienda colocar una cucharada sopera por taza de agua, y llevar ambos ingredientes a ebullición con la tapa puesta para evitar la pérdida de los aceites esenciales. Luego, se retira del fuego y se deja reposar durante 5 minutos con la tapa puesta. Después, se cuela y se consume, pudiendo endulzar al gusto. Si estás interesado en tener esta planta lista para preparar infusiones en casa, aquí puedes consultar su precio.
Baños con lavanda
Esta es una excelente forma de utilizar la lavanda para promover el sueño, utilizando el mismo método de infusión. En este caso, se recomienda usar 70 gramos de lavanda por cada 2 litros de agua, hervir y luego colar la preparación dentro de la bañera para sumergirse en ella. Esta alternativa es más ecológica y sin residuos que las bombas de baño, además de ofrecer beneficios garantizados para la relajación.
Aceite esencial de lavanda
El aceite esencial de lavanda es útil para combatir la ansiedad, ya que sus moléculas altamente volátiles tienen la capacidad de penetrar en el torrente sanguíneo al entrar en contacto con la piel, generando efectos terapéuticos en el cuerpo.
Al utilizar el aceite esencial tópicamente, es importante diluirlo previamente, ya que al ser un aceite altamente concentrado podría causar irritación. Se recomienda agregar tres gotas a un aceite portador, como el de coco o almendras. Posteriormente, se aplica sobre la zona a tratar y se deja actuar. Esta mezcla también puede usarse como aceite de masaje, ideal para aliviar dolores musculares y tensiones acumuladas.
Otra forma de utilizar el aceite esencial es a través de inhalaciones, simplemente inhalándolo directamente desde el frasco o colocando unas gotas en un pañuelo para llevarlo consigo durante el día. Si deseas adquirir este aceite esencial para tenerlo en casa, aquí puedes hacerlo.
Macerado de lavanda
En caso de no disponer de aceite esencial de lavanda o si prefieres elaborar el tuyo propio, puedes preparar un macerado de lavanda en casa. Para ello, coloca un puñado de lavanda en un frasco con aceite, asegurándote de que quede bien sumergido. Deja reposar la mezcla durante al menos un mes, luego cuela el líquido. El resultado será un aceite impregnado con los beneficios de la planta, aunque es importante mencionar que no será tan potente como el aceite esencial puro. Se utiliza de la misma manera que el aceite esencial, sin necesidad de diluirlo.
Tinturas y extractos fluidos
Estas preparaciones son elaboradas por herbolarios o boticarios, y comúnmente se encuentran en tiendas naturistas. Pueden estar disponibles en forma de extracto alcohólico o glicerinado, en caso de que la persona tenga contraindicaciones para consumir alcohol. Se recomienda ingerir hasta 50 gotas por día, siguiendo las indicaciones del envase sobre las dosis recomendadas.

Advertencias y efectos secundarios de la lavanda
Advertencias de la lavanda
- Individuos con sensibilidad o alergia a alguno de los principios activos de la lavanda.
- Personas con presión arterial baja, ya que la lavanda posee propiedades hipotensoras que pueden disminuir aún más la presión arterial, ocasionando mareos, náuseas y otros síntomas.
- Personas con problemas de estreñimiento.
Efectos secundarios de la lavanda
- La ingesta oral de lavanda puede provocar estreñimiento y aumento del apetito, por lo que se recomienda monitorear los efectos al consumirla por primera vez para asegurarse de que no genere estos efectos en el individuo en particular.
- La aplicación directa de aceite esencial de lavanda sin diluir en la piel o ingerido puede causar irritación y dermatitis.
Después de conocer las propiedades, beneficios y contraindicaciones de la lavanda, es posible que desees tenerla de manera frecuente en casa. En este enlace puedes encontrar información sobre cómo plantar lavanda y cómo secarla.
Si estás interesado en leer más artículos similares a Lavanda: características, beneficios y efectos secundarios, te invitamos a visitar nuestra sección de Remedios naturales.
Bibliografía
- Cebrián, J. (2002) Diccionario de plantas medicinales. Barcelona: RBA Libros.
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