Poto con las hojas amarillas: causas y qué hacer

El poto, epipremnum aureum o pothos, es una de las plantas más populares en decoración de interiores. Posee hojas brillantes de color verde que cuelgan o trepan abundantemente. Aunque son fáciles de cuidar, en ocasiones pueden presentar hojas amarillentas. Si es solo de manera puntual no debe preocupar, pero si son varias hojas al mismo tiempo, podría indicar un problema de clorosis debido a un cuidado inadecuado.
Las principales razones por las que un poto puede tener hojas amarillas incluyen el exceso de riego, un sustrato mal preparado, la falta de humedad, la exposición directa a la luz, entre otros factores. ¿Qué acciones tomar en cada caso? Dependiendo de la causa, se deberá regar solo cuando el sustrato esté seco, aumentar la humedad ambiental, colocar la planta en un lugar con luz filtrada, entre otras soluciones. Si deseas saber por qué tu poto tiene hojas amarillas, te recomendamos leer este artículo de ContaminaciónAmbiental, donde encontrarás una guía detallada sobre las causas del poto con hojas amarillas y cómo solucionarlo.
Exceso de riego
A pesar de ser una planta de fácil mantenimiento, en ocasiones se puede cometer el error de regarla en exceso, siendo el exceso de riego un problema común. Las hojas amarillas pueden ser un indicio de un riego excesivo. El poto solo necesita ser regado cuando la capa superior esté seca. Es preferible regar menos que regar en exceso.
Para corregir esta situación, disminuye la frecuencia de riego si te das cuenta de que la estás regando demasiado, y sigue la pauta de dejar secar entre riegos para evitar que vuelva a ocurrir.
Si el exceso de agua es reciente, es posible que las hojas se vuelvan amarillas por un corto período. No obstante, si se mantiene constante, las raíces del poto empezarán a pudrirse, lo cual no tiene solución.
Para abordar este problema, será necesario eliminar las raíces deterioradas cortando con herramientas previamente lavadas y desinfectadas las partes afectadas. Estas se reconocen por su aspecto húmedo y oscuro. Cambia la planta a una maceta nueva, asegurándote de limpiar bien la anterior y de utilizar un nuevo sustrato. De esta forma, te aseguras de comenzar en un entorno limpio.
En este artículo puedes encontrar información sobre las Mejores regaderas para plantas. También te recomendamos leer este otro post acerca de Cómo regar las plantas de interior.

Sustrato mal preparado
Si tu planta tiene un sustrato que solo contiene tierra, es probable que tenga una mala estructura y un mal drenaje, lo que conduce a retener agua y producir encharcamiento. Siempre es recomendable preparar un sustrato que cuente con un buen aporte de nutrientes, materia orgánica y un material que facilite el drenaje. En el caso específico del poto, no tolera el encharcamiento, por lo que es necesario proporcionar un sustrato que permita un adecuado drenaje.
El sustrato ideal para el poto puede ser preparado en casa usando partes iguales de humus de lombriz y turba, añadiendo un puñado de perlita. Mezcla bien todos los componentes y trasplanta el poto a esta nueva mezcla. Riega la planta inmediatamente después de haber sido trasplantada para liberar posibles bolsas de aire y favorecer su adaptación.
Es crucial también contar con un buen recipiente o maceta que posea orificios de drenaje en la parte inferior. Si la maceta está completamente sellada, el agua no podrá drenar y las plantas sufrirán de problemas relacionados con el exceso de humedad. Es fundamental que el agua pueda circular sin dificultad.
Exceso de riego
Uno de los problemas más comunes que puede enfrentar tu poto es el exceso de agua en su sistema radicular, lo cual puede causar que las raíces se pudran. Si tienes la planta en el interior y deseas evitar que el agua gotee sobre tus muebles, utiliza un plato para macetas o una bandeja recolectora de agua, o bien una sobremaceta o cubremaceta, de donde deberás retirar el agua sobrante pocos minutos después de haber regado.
En estos enlaces encontrarás los materiales que te hemos mencionado para mejorar el sustrato y el drenaje de tu potus:
Falta de humedad
Al poto le agrada mantener cierta humedad en su entorno, y cuando carece de ella, las hojas comenzarán a amarillear, llegando incluso a secarse. Al tratarse de una planta de interior, es bastante común que el potos se sitúe cerca de estufas o calefactores durante el invierno, los cuales eliminan la humedad del ambiente, por lo que hay que tener precaución con las plantas en el interior.
Para prevenir esta situación, rocía las hojas con agua para mantener una buena humedad ambiental. Otra opción es colocar la maceta sobre una bandeja o un platillo con piedras y agregar agua. Esto proporcionará humedad al entorno de la planta y mantendrá niveles óptimos de humedad.
Aquí puedes adquirir los materiales recomendados para resolver el problema del poto con hojas amarillas debido a la falta de humedad ambiental:

Luz directa
El poto es una planta de interior, lo que indica que necesita semisombra o luz filtrada. Las hojas amarillas pueden aparecer cuando recibe demasiada luz, lo que eventualmente provoca que se quemen.
Cambia la ubicación de tu poto colocándolo cerca de una ventana, debajo de un domo o en semisombra. Evita la exposición directa al sol, sobre todo al mediodía, cuando este es más intenso.
En estas guías podrás conocer más sobre plantas verdes de interior y plantas de interior sin flores.

Deficiencia de nutrientes
El suelo contiene los elementos que la planta absorberá para nutrirse, pero con el tiempo se agotarán. Cuando esto ocurre, las hojas comenzarán a amarillear por falta de nutrientes necesarios para producir clorofila.
La deficiencia más común es la de hierro, que se manifiesta con amarillamiento desde la punta hacia la base de la hoja o en las venas de la misma. Para solucionarlo, puedes agregar hierro al sustrato utilizando sulfatos de hierro o quelatos de hierro, siendo esta última opción la más estable pero también la más costosa. Cualquiera de estas alternativas servirá. Si no consigues estos abonos, puedes optar por un fertilizante balanceado que ayude a reponer todos los nutrientes agotados en el suelo.
En estos enlaces podrás adquirirlos:

Variaciones de temperatura
El poto prospera en un rango de temperatura que va de 20 a 31 ºC, pero si se expone a frío o calor extremos, las hojas sufrirán un shock térmico y empezarán a amarillear.
Ante esta situación, si notas una temperatura extrema en la zona para el rango que requiere el potus, traslada tu planta a un lugar cálido, sin exceso de calor ni exposición directa al sol, pero alejado también de corrientes de aire frío para evitar que pase frío.
Ahora que sabes por qué tu poto tiene las hojas amarillas y cómo actuar en cada caso para recuperarlo, te recomendamos seguir aprendiendo sobre esta planta para cuidarla de la mejor manera y consultar nuestras guías sobre Cómo tener un poto frondoso y Cuidados del potus o poto.
Si te interesa leer más artículos similares a Poto con hojas amarillas: causas y soluciones, te recomendamos visitar nuestra categoría de Cultivo y cuidados de las plantas.
Bibliografía
- Baesa, M. D. (2021). La Guía Definitiva de las Plantas de Potos: Variedades de Epipremnum, Philodendron y Scindapsus, Cuidados y Propagación. (n.p.): Amazon Digital Services LLC - KDP Print US.
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