Jardinería sustentable o cómo preservar el planeta desde tu hogar

La jardinería sustentable es una tendencia consolidada debido a la creciente conciencia de la sociedad, así como de las instituciones y empresas responsables del entorno común. Estas prácticas no solo benefician al planeta, sino que se han convertido en una necesidad para preservar el medio ambiente. A pesar de que pueda parecer una tarea adicional, este modelo se basa en principios viables, accesibles y que no requieren un gran esfuerzo.

La jardinería sustentable busca crear espacios personales o compartidos que puedan mantenerse y prosperar con recursos naturales, reduciendo al mínimo la dependencia de riego o asistencia externa. Esto implica disminuir o eliminar por completo el uso de productos químicos, tanto en forma de nutrientes para el suelo como en herbicidas o fertilizantes con un alto impacto ambiental.

El objetivo final de lograr un jardín sustentable es alcanzar un equilibrio ecológico en todos los aspectos. Adoptar esta nueva filosofía tiene repercusiones positivas que van más allá de ayudar al planeta, ya que la jardinería sustentable resulta más económica, requiere menos tiempo y esfuerzo. Esto es aún más cierto si se cuenta con las herramientas y la tecnología adecuadas, como las diversas herramientas de Husqvarna, una marca reconocida por su innovación y la fiabilidad de su maquinaria a batería, sin emisiones y con un mantenimiento muy reducido.

1. Escoger especies adaptadas al clima

Al diseñar tu jardín, elige plantar o mantener especies de árboles, plantas, arbustos, trepadoras y setos autóctonas o aquellas que, aunque no lo sean, se adapten a las condiciones climáticas de tu zona.

2. Emplear sistemas de riego eficientes o aprovechar el agua de lluvia

Optar por especies autóctonas y resistentes a la sequía te permitirá reducir las necesidades de riego en tu jardín; además, la instalación de sistemas eficientes o la recolección y aprovechamiento del agua de lluvia pueden ayudarte a ahorrar hasta un 70% de agua.

3. Optar por césped de bajo mantenimiento o restringir su uso en áreas muy secas

El césped requiere un alto consumo de agua con riegos frecuentes durante el verano, por lo que, si vives en una zona con escasas lluvias, es mejor reemplazarlo por césped de bajo mantenimiento o limitar su presencia a las zonas más sombreadas de tu jardín. En realidad, los árboles y las estructuras forman parteLas plantas que ofrecen sombra en tu jardín también pueden ser valiosas aliadas y ser el punto de reunión familiar perfecto durante los días calurosos de verano.

4. Reciclaje de restos de jardinería

El cuidado del jardín genera una gran cantidad de residuos que pueden ser reutilizados como abono o incluso como material para parrillas y barbacoas, o como refugio para la fauna silvestre. Adquirir una compostera o fabricarla tú mismo te permitirá disponer de abonos naturales durante todo el año. Permitir que los hongos, bacterias y otros organismos transformen tu entorno en uno más fértil contribuirá a crear un jardín lleno de especies autóctonas, más adaptadas al clima y la fauna local. Fomentar la diversidad biológica resulta beneficioso para el medio ambiente al promover el respeto y la conservación del terreno, sin empobrecerlo ni dañarlo.

5. Tratamientos naturales y plantas antiplagas y antienfermedades

Reduzcir el uso de productos químicos es una práctica en crecimiento, incluso entre los expertos en jardinería y agricultura, debido a que se ha demostrado que los herbicidas, fungicidas y plaguicidas empobrecen los suelos. Existen remedios naturales muy eficaces para combatir las plagas en frutales y jardines que es importante conocer. Además, hay plantas y arbustos que son efectivos para mantener alejados a insectos, plagas y ciertos animales. ¿Un ejemplo? La menta espanta a ratas y hormigas y atrae mariposas y abejas; el ajo combate bacterias y hongos; la salvia controla las babosas y el hinojo repele plagas como el pulgón.

6. Promover la biodiversidad con plantas aromáticas, setos vivos y refugios para la fauna

Las plantas aromáticas son una excelente adición al jardín no solo por su fragancia y utilidad en la cocina o medicina, sino también por atraer polinizadores que fomentan la biodiversidad natural en tu jardín y alrededores. A estas especies se suman los setos vivos autóctonos, que sirven como refugio para polinizadores como las abejas, aves y otros organismos. Si deseas, también puedes apilar troncos y hojas en alguna área de tu jardín para crear refugios de insectos, guarida para erizos en invierno y otros animales salvajes. Otra opción es colocar algún recipiente o construir una charca natural para favorecer la vida de los anfibios y así tener un bebedero natural para aves en primavera y verano.

7. Incorpora un huerto a tu jardín

La jardinería sostenible implica encontrar formas de hacer que el entorno sea útil más allá de lo puramente decorativo. Esto significa que frutas, verduras, legumbres, hierbas y hortalizas tienen cabida en tu jardín. Cultivar ciertos alimentos te permitirá reducir gastos en energía, transporte y producción. Además, tener jardines comestibles cambia la forma en que se percibe el entorno.

8. Disminuye las emisiones de gases contaminantes

El cuidado del jardín requiere el uso de herramientas que a veces no son del todo sostenibles, como aquellas que funcionan con gasolina, las cuales no solo emiten gases contaminantes, sino que también implican manipular y almacenar gasolina y aceites en casa, lo que conlleva riesgos de derrames y seguridad. Husqvarna ofrece una amplia gama de herramientas sin emisiones que funcionan con baterías, con el mismo rendimiento que las de motor a gasolina. Estas herramientas son menos ruidosas y, por lo tanto, más respetuosas con el medio ambiente. Además, requieren menos mantenimiento. Descubre la gama Husqvarna Aspire de herramientas eficientes, cómodas y plegables, diseñadas especialmente para espacios de almacenamiento reducido y con la batería de 18 V desarrollada por Husqvarna en colaboración con las principales marcas.

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